Aprendiendo a divertirse: sus primeros juguetes
Los primeros juguetes estimulan las habilidades del bebé y ayudan a su desarrollo, así que deben elegirse cuidadosamente en función de su edad. Nunca es pronto para empezar a divertirse.
Juguetes para recién nacidos
Los bebés empiezan a descubrir el mundo con su herramienta más potente: los sentidos. Por el momento son la vista y el oído los canales que le ayudan a relacionarse con el entorno que le rodea. Sus primeros juguetes deben tener una importante misión: estimular esos dos sentidos. Desde su nacimiento, el bebé puede captar sonidos, movimientos y colores llamativos. Los móviles de cuna, especialmente los musicales, son un primer juguete muy adecuado. Ayudan a los bebés a relajarse con nanas y sonidos de la naturaleza al tiempo que proyectan dibujos y luces sobre el techo. Una opción parecida son los animales de peluche con música y luces de estrellas. Se pueden colocar sobre la mesita de noche y relajan al bebé antes de dormir. Es un buen punto de partida para ir iniciando al pequeño en la rutina del sueño.
Conviene cambiar los juguetes de cuna cada cierto tiempo para que el bebé descubra nuevos estímulos.
Los juguetes mantienen activos los sentidos de los bebés, lo que resulta fundamental para desarrollar determinadas áreas de su cerebro en el primer mes de vida.
Juguetes a partir de 3 meses
Desde los tres meses, los bebés ya pueden tocar y agarrar los objetos que tienen a su alrededor. Si antes se conformaban con ver y escuchar, ahora querrán chupar y morder todo cuanto alcancen. Los juguetes les ayudan en esta etapa a conocer y diferenciar las texturas. También potencian las nuevas destrezas que van adquiriendo, como la coordinación de movimientos o el agarre en forma de pinza, cogiendo los objetos con el pulgar y el índice.
Los gimnasios para bebés son mantas acolchadas con arcos donde cuelgan juguetes, espejos o sonajeros. El bebé puede tumbarse bocarriba o bocabajo. Otra variedad son los cojines de actividades. El cojín rodea al bebé ayudándole a mantener una posición cómoda mientras le divierte con juguetes interactivos. Tanto las mantas de actividades como los cojines son ideales para esta etapa.
Ha llegado el momento de añadir un juguete de paseo para el carro. Se sujetan al cochecito para que estén siempre al alcance del bebé durante sus salidas.
A esta edad, los juguetes deben estar orientados a estimular la motricidad fina de los bebés, es decir, la habilidad motriz de manos y dedos, que les ayudará a manejar objetos.
Juguetes a partir de 6 meses
Como norma general, después de los primeros seis meses los bebés aumentan su actividad física y empiezan a gatear. Para ayudarle en sus comienzos puedes colocar un puzle de goma en el suelo y repartir por él sus juguetes.
El bebé descubre algo fascinante: él solo puede conseguir que ocurran cosas. Los juguetes electrónicos e interactivos despiertan ahora su interés. Empieza a comprender que si aprieta un botón sonará una música o se encenderá una luz. Los juguetes tienen que seguir estimulando al bebé: encajar piezas, apilables, instrumentos musicales… Como ya es capaz de sentarse solo, las posibilidades de juego se multiplican.
Puedes deslizar sus juguetes de atrás hacia adelante por el suelo para favorecer la coordinación ojo-mano del bebé. También conviene que le ayudes a hacer sencillos ejercicios para favorecer que esté activo y se mueva desde pequeño.
Los padres deben ayudar a los bebés en la estimulación a través del juego. No basta con darles los juguetes más adecuados para su desarrollo: hay que tumbarse en el suelo con ellos y mostrarles las infinitas posibilidades de cada uno.
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