En la cocina con los niños: disfrutar sin peligro
Cocinar con los niños es una de las actividades más divertidas y edificantes que pueden compartir los padres con sus hijos. Los enanos descubrirán que con sus manos pueden hacer verdaderas delicias, y aprenderán a defenderse entre fogones, algo que les será muy útil de por vida. Pero la cocina tiene ciertos riesgos, por eso os hemos preparado esta infografía, para que disfrutéis de la forma más segura posible.
En la cocina con los niños
Claves para disfrutar sin peligro
1.
Ten preparados sus delantales y utensilios en un lugar visible, para que se animen a involucrarse en la cocina siempre que les apetezca.
2.
Utiliza taburetes, escalones o pequeñas escaleras de dos o tres peldaños para que lleguen a la altura de la encimera y no corran peligro de caerse o de quemarse por no alcanzar bien.
3.
Puede ser buena idea invertir un poco de dinero en útiles adaptados a ellos: cuchillos de plástico, peladores, rodillos… no tengas miedo a dejarle investigar, si estás a su lado y los materiales están adaptados, es poco probable que haya sustos. Otra buena inversión son las ollas lentas, donde ellos podrán introducirlos ingredientes e ir viendo cómo avanza el tiempo de cocción.
4.
Establece normas básicas que no se pueden saltar: los fuegos y el horno solo los manejas tú, hay que retirarse cuando se vaya a cocinar algo con aceite caliente, las cosas del horno las saca solo el adulto…
5.
No te preocupes por el desastre en la cocina: es mejor que dediques toda tu atención a estar pendiente de que los niños disfrutan y no sufren peligros, a que estés pendiente de las manchas. Eso sí, cuando terminéis de cocinar... ¡a recoger entre todos!
6.
No te preocupes por el desastre en la cocina: es mejor que dediques toda tu atención a estar pendiente de que los niños disfrutan y no sufren peligros, a que estés pendiente de las manchas. Eso sí, cuando terminéis de cocinar... ¡a recoger entre todos!
7.
Puedes ayudarles a ir creando poco a poco su libro de recetas, donde apuntar las elaboraciones que van haciendo.
Un primer paso antes de ponerse manos a la obra puede ser sentarse con su libro a mirar la receta, buscar los ingredientes en la despensa…
¡Será un gran aprendizaje para ellos!
8.
Cuidado con los aparatos eléctricos y objetos cortantes: batidora, mandolina, rallador, tijeras… considerad en casa el nivel de madurez y motricidad fina de los niños para saber cuáles sí pueden utilizar y cuáles es mejor adaptar a su edado esperar un tiempo para poder utilizarlos.
9.
Mucha paciencia: las primeras veces veras que los niños se impacientan, quieren ir muy rápido, no entienden bien los pasos… pero poco a poco irán asimilando que es necesario no saltarse ningún paso en las recetas y dejar que cada alimento se cocine el tiempo que necesite; pueden ir fregando mientras las masas suben o los alimentos se hornean, o podéis tomar un tentempié mientras el guiso se termina.
10.
Ten la cámara a mano: pocas cosas son tan divertidas para los niños como llenarse de harina, amasar una masa de galletas y hacer las formas de las letras de sus nombres, inventarse nuevas figuras… ¡déjales hacer, olvídate de las manchas y dispara sin parar tu cámara!
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