Cómo elegir un proyector LED

Alberto García Matos

Responsable de bricolaje en Carrefour.es

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El proyector LED es la mejor iluminación para la entrada de la casa, el garaje y los patios porque ofrece una luz directa de gran potencia y además supone un importante ahorro energético.

Elegir la potencia adecuada

El proyector LED es una buena opción para iluminar los espacios exteriores de la casa de manera funcional y decorativa. Por un lado, iluminan con intensidad las zonas de paso y de acceso a la casa para evitar posibles accidentes y, por otro, sirven para destacar elementos concretos de la fachada o el jardín.

Cuando se sustituyen los focos halógenos exteriores por proyectores LEDS tenemos que calcular la equivalencia de potencia, porque se necesitan menos watios que en los focos halógenos. Un foco halógeno de 400W se puede sustituir por un proyector LED de 60W.

A tener en cuenta: Los proyectores pueden ser fijos o portátiles. Los proyectores fijos se colocan directamente sobre la pared o una estructura y su función es resaltar objetos. Los portátiles se utilizan para un uso esporádico cuando se necesita iluminar un espacio para un evento, por ejemplo. Pueden llevar cable o no, en ese caso llevan una batería que se carga para funcionar autónomamente.

Existen proyectores y bombillas LED con detector de movimiento que pueden ser instalados en zonas de uso ocasional para conseguir un mayor ahorro.

Qué protección necesita el proyector

Al estar en el exterior es importante saber cuál es el nivel de protección IP que tiene el proyector respecto al polvo o la lluvia. Son dos números que aparecen en la etiqueta: el primero señala la protección frente al polvo o los agentes sólidos, y el segundo número es la protección frente a los líquidos. El nivel más bajo, que no tiene protección es el cero.

En las bombillas LED para exterior hay que buscar una protección IP65 que significa que está totalmente protegido contra polvo y contra chorros de agua en todas las direcciones.

A tener en cuenta: En un proyector LED no hay que realizar cambio de bombillas como en los tradicionales focos halógenos de exterior. Cuando finaliza la vida útil del LED hay que sustituir el proyector.

También podemos instalar proyectores LED sumergibles para la iluminación de las piscinas, en estos casos hay que buscar la máxima protección IP para líquidos.

Qué luz elegir para el exterior

La elección del tono de luz en el proyector LED es importante si no queremos tener problemas con los vecinos por una potencia excesiva que pueda molestar. Es conveniente elegir un tono de luz cálido, porque no deslumbra. Lo más recomendable es que no supere los 3.000 grados kelvin de temperatura del color. A más grados kelvin, la luz será más fría.

A tener en cuenta: Al elegir el proyector LED necesitamos saber la cantidad de luz que produce, que viene determinado por los lúmenes, de manera que a más lúmenes mayor es la luz que emite. Sin embargo, el consumo es seis veces menor que un foco halógeno.