Cómo elegir el reproductor de música que necesitas

El camino que tenemos que recorrer diariamente para ir a trabajar o a estudiar se nos puede hacer muy largo si no contamos con un entretenimiento que nos haga el trayecto más llevadero. Algunos eligen un libro electrónico o tradicional, otros optan por la prensa diaria. Pero si hay un colectivo que gana por goleada es el de los que prefieren ir escuchando música. Aunque muchos optan ya por hacerlo en su propio smartphone, todavía muchos otros siguen apostando por otro tipo de reproductores de música.

Un dispositivo imprescindible

Al margen de su fabricante, su capacidad, sus prestaciones o del tipo de archivos que nos permita ver o escuchar, un reproductor de audio portátil es un dispositivo que tiene, necesariamente, cuatro características: almacena los archivos que queramos, los organiza o los clasifica, los reproduce y, como su propio nombre indica, ha de ser portátil.

Mp3, Mp4 y todos los demás MpX en realidad no son los dispositivos que nos permiten reproducir archivos multimedia, sino que se trata de formatos de compresión de audio digital.

Una canción en formato original con extensión .wav puede tener un tamaño de 25 MB, pero al pasarla a .mp3 será sometida a un algoritmo que le hará perder tamaño sin que nosotros notemos pérdida alguna de calidad, reduciéndola a poco más de 3 MB y haciéndola más “manejable”.

Lo que ahora buscamos es un reproductor portátil de audio digital, pero debemos ser conscientes de que en el mercado hay una amplia variedad de estos dispositivos, con muchas diferencias entre ellos que afectan a sus prestaciones, su precio y el tipo de archivos que reproducen.

¿Simples reproductores u ordenadores en miniatura?

Actualmente, todos los reproductores de audio digital reproducen sin ningún problema los archivos .mp3, además de muchos otros, como .mpeg, .wav, .ogg o .wmv, pero todos ellos son archivos de audio. La diferencia real entre unos dispositivos y otros radica en qué más son capaces de hacer.

Los reproductores Mp3 se limitan a reproducir música en diferentes formatos, aunque algunos también incluyen características adicionales como grabación de voz o radio.
Por su parte, los Mp4 incorporan la capacidad de comprimir, almacenar y reproducir vídeo, por eso tienen una pantalla LCD. Dependiendo de su tamaño, es posible ver una película de unos 700 MB que antes tenía un tamaño de 5 GB.
Los reproductores Mp5 hacen todo lo anterior pero además tienen una cámara integrada con la que hacer fotos y, en algunos casos, grabar vídeos, salida para TV y juegos sencillos.
En el caso de los reproductores Mp6, ya encontramos pantalla táctil, GPS y reproducción de televisión.
Los Mp7 incorporan la capacidad de actuar como un teléfono móvil (llamadas y SMS).

El número que acompaña a las siglas MP simboliza una evolución respecto a la generación anterior. Un reproductor Mp7 sigue reproduciendo música igual que un Mp3, solo que además incorpora muchas funcionalidades más. Si lo que queremos es solamente escuchar canciones, basta con este último, pero si buscamos más capacidades debemos analizar el mercado en busca de nuestro modelo ideal.

Elegir un reproductor

Hay muchos factores que influyen a la hora de decantarse por un modelo u otro. El primero es la capacidad. Pensemos que una canción suele ocupar entre 3 y 4MB, y una película entre 600MB y 2 GB Si solo escuchamos música y tenemos una discoteca reducida, bastará con un reproductor de pocos gigas, pero si vamos a cargar en el dispositivo cientos de discos y varias películas, deberíamos optar por un reproductor de, al menos, 32 GB.

La pantalla es un factor decisivo en la compra, porque hace subir mucho el precio del dispositivo. ¿Realmente la vamos a utilizar? Si queremos ver vídeo o usar el GPS, necesitaremos una grande, como mínimo de 2,5 pulgadas.

El tamaño del reproductor también es importante, porque no nos interesa llevar el bolsillo un aparato enorme y pesado, pero tampoco uno diminuto en el que resulte imposible apretar un solo botón sin presionar los demás. La autonomía que nos ofrece la bateríaes también clave.

Muchos reproductores incluyen extras como la grabación de voz, radio y software para gestionar los archivos y para hacer más cómodo el paso de los mismos desde el ordenador hasta el dispositivo portátil.

Si te ha interesado este artículo te recomendamos: